Análisis del Mundial de Catar 2022: Ronaldo y Portugal, último salto juntos
Introducción
Portugal participará por octava vez en una ronda final de la Copa del Mundo, la sexta consecutiva desde el Mundial de Corea del Sur y Japón en 2002. Una afirmación plena del equipa das Quinas en los últimos 20 años, reforzada por la ambición de querer, por primera vez, ser campeones del mundo, tras haber ganado ya la Eurocopa en 2016. Hay quien dice que esta es la mejor selección portuguesa de la historia, aunque su principal estrella, Cristiano Ronaldo, esté disputando su último Mundial.
De la teoría a la práctica, lo cierto es que desde que se ganó la Nations League en 2019, celebrada en Portugal, en Oporto, han sido pocos los éxitos de la selección después de la Eurocopa de Francia. En la edición de 2020 (celebrada en 2021), cayó en octavos de final, contra Bélgica, y en la Nations League del año siguiente perdió contra Francia, cuando le bastaba con un empate, y se quedó fuera de la final four de la competición. Este "fue suficiente", de hecho, volvió a ocurrir este año, cuando... un empate contra Serbia fue suficiente para pasar al Mundial. Portugal perdió en el Estadio de la Luz, forzando un afortunado play off, cuando después de haber ganado a Turquía, el último obstáculo era Macedonia del Norte, que eliminó a Italia con una tremenda sorpresa.
Portugal llega a este Mundial con su estrella en innegable declive -Cristiano Ronaldo está realizando, probablemente, la peor temporada de su carrera-, con su seleccionador en el momento más cuestionado de la historia -Fernando Santos tocó el cielo en 2016 y estuvo a punto de bajar al infierno-, pero con materia prima para, de hecho, soñar, apoyado por la participación de Diogo Costa en la portería, Cancelo y Nuno Mendes en las bandas, Bernardo Silva en el centro del campo y Rafael Leão en el ataque, donde siempre faltará Diogo Jota, una de las grandes ausencias por lesión.
Fortalezas
Portugal tendrá los mejores laterales de todos los equipos del Mundial. En el lado derecho están João Cancelo (Manchester City) y Diogo Dalot (Manchester United); en el izquierdo, Nuno Mendes (PSG) y Raphael Guerreiro (Borussia Dortmund). Cuatro pesos pesados para sólo dos puestos, dejando fuera otros nombres como Mário Rui (Nápoles), Nélson Semedo (Wolverhampton), João Mário (FC Porto) o Nuno Santos (Sporting), entre otros. El centro del campo portugués también desprende calidad y soluciones. Bernardo Silva y Bruno Fernandes aportan la intensidad de la Premier League, mientras que William Carvalho y Rúben Neves aportan la consistencia necesaria. Luego, los polivalentes Matheus Nunes y Otávio, pero también la nueva ola personificada en Vitinha (PSG).
Debilidades
Los defensas centrales de Portugal han sido durante mucho tiempo una preocupación dada la avanzada edad de sus jugadores clave en los últimos años, especialmente Pepe (39 años, FC Porto) y José Fonte (38 años, Lille). Rúben Dias se ha hecho un nombre en el Manchester City, mientras que António Silva, un central de 19 años que se ha hecho un nombre en el Benfica junto al argentino Otamendi, debutará en la Copa Mundial de la FIFA. Sin embargo, teniendo en cuenta que nunca ha jugado con la selección, y considerando también la lesión de larga duración de Pepe, la zona central de la zaga de Portugal podría resultar uno de sus principales puntos débiles. También en el ataque, abundando las opciones, el combinado luso ya no tiene una referencia ofensiva como fue, en tiempos pasados, Pauleta o incluso Nuno Gomes. André Silva no es indiscutible y Gonçalo Ramos fue llamado esta vez por su rendimiento en el Benfica, pero la opción número uno debería seguir siendo Cristiano Ronaldo.
Once ideal
Diogo Costa; João Cancelo, Pepe, Rúben Dias, Nuno Mendes; Otávio, Rúben Neves, Bruno Fernandes, Bernardo Silva; Rafael Leão y Cristiano Ronaldo.
Las elecciones para el once inicial de Portugal estarán directamente relacionadas con el sistema táctico que Fernando Santos elija para este Mundial. Viendo la plantilla de 26 jugadores, y con la presencia de Gonçalo Ramos (Benfica) y André Silva (Leipzig), todo indica que el seleccionador optará por una mayor presencia ofensiva y, por tanto, con dos delanteros. Y eso estará, en consecuencia, relacionado con el fin -o la pausa- del 4-3-3 que más ha utilizado Fernando Santos. Sin embargo, la apuesta en el 4-4-2 será diferente a la anterior. Portugal ya no cuenta con los clásicos extremos, como Nani, Quaresma o incluso Ronaldo en el pasado. En cambio, tiene mucha calidad y versatilidad en el centro del campo, lo que le permite jugar con el llamado rombo, optando por un centrocampista más defensivo, entre Rúben Neves y William Carvalho, un centrocampista más dinámico, como Bruno Fernandes o Bernardo Silva, y luego con centrocampistas interiores, como viene haciendo con Otávio.
En la portería, la transición de Rui Patrício a Diogo Costa es segura. El portero del Oporto se ganó el puesto en la fase de clasificación y sus actuaciones, tanto con la selección como, sobre todo, con los Dragones, especialmente en la Liga de Campeones, no dejan lugar a dudas.
En el lado derecho de la defensa parece haber pocas dudas de que João Cancelo será titular ante Diogo Dalot, pero en el lado izquierdo la elección entre Raphael Guerreiro y Nuno Mendes dependerá del momento de forma y del rival al que se enfrente Portugal.
En el centro del campo, Bernardo Silva y Bruno Fernandes parecen ser los titulares. En cuanto al ataque, Cristiano Ronaldo debería mantener su presencia, pero está por ver con quién y con cuántos delanteros.
Principales dudas
Hay varias dudas en el once de Portugal, sobre todo teniendo en cuenta que no está confirmado el cambio de táctica, de un 4-3-3 a una vuelta al 4-4-2 en rombo. Diogo Jota sería, en principio, titular en el ataque portugués pero, ante su ausencia por lesión, resulta probable la presencia de Rafael Leão, que ha continuado la última temporada de enorme brillantez en el campeón italiano, el Milán, en detrimento, por ejemplo, de João Félix, que no ha sido titular en el Atlético de Madrid. En el centro del campo, Otávio parece encajar, debido a su versatilidad y al hecho de que el jugador luso-brasileño del Oporto fue crucial en el tramo final de la clasificación portuguesa. Por último, en la defensa existe la duda de Pepe, que se encuentra en la fase final de recuperación de la lesión que le ha mantenido alejado de los terrenos de juego. Sería titular junto al indiscutible Rúben Dias.
Predicción
Portugal afronta el Grupo H con buenas posibilidades de clasificación, siendo favorita en todos los partidos, incluso contra Uruguay. El objetivo será terminar primero, evitando el primer puesto del Grupo H, que tiene Brasil, y medir fuerzas, en teoría, con Suiza o Serbia. El debut frente a Ghana es decisivo para estas aspiraciones, y hay optimismo, dentro de la selección portuguesa, respecto a la posibilidad de llegar a las últimas rondas de esta Copa del Mundo. Las previsiones apuntan a un puesto entre los ocho primeros, es decir, a una plaza en los cuartos de final, recordando que la mejor clasificación histórica de Portugal en los Mundiales se remonta al debut en la fase final, en 1966, con el tercer puesto gracias a la genialidad de Eusébio da Silva Ferreira. En 2006 estuvo cerca, con el cuarto puesto.