El tricampeón del mundo de Red Bull criticó el nuevo circuito urbano y dijo el miércoles que no tenía ningún interés en el espectáculo que rodea el evento.

"Es un 99 por ciento espectáculo y un uno por ciento evento deportivo", dijo el holandés, cuando se le pidió que evaluara el regreso de este deporte a Las Vegas tras 41 años de ausencia.

"No hay muchas emociones para ser honesto. Quiero decir que no me gusta... Quiero centrarme siempre en el rendimiento, no me gustan todas las cosas que lo rodean", dijo.

"Sé que, por supuesto, hay algunos lugares en los que sabes que (es) parte de ello, pero digamos que no es mi interés", añadió.

Preguntado por su opinión sobre el circuito urbano, que llevará a los pilotos por el famoso 'strip' de Las Vegas, Verstappen fue tajante.

"Sí, no es muy interesante... es que no hay muchas curvas para ser honesto", dijo.

Tras participar en la ceremonia de apertura, que contó con un espectáculo de drones y música, el piloto de 26 años dijo que no asistiría a la fiesta del miércoles por la noche.

Cuando se le preguntó si al menos estaría deseando que llegara la carrera del domingo, la falta de entusiasmo de Verstappen volvió a ser evidente.

"No. No, pero tengo ganas de intentar hacerlo lo mejor posible, pero no tengo ganas de esto", dijo, señalando a las zonas de hospitalidad por encima del paddock.

Verstappen dijo que no había hablado con los organizadores de la F1 sobre sus puntos de vista, pero dijo que dudaba que sus opiniones tuvieran un impacto en ellos.

"No lo sé. Supongo que seguirán ganando dinero me guste o no, así que no depende de mí. Pero tampoco voy a fingir", dijo.

"Simplemente siempre expreso mi opinión en cosas positivas y en cosas negativas, y así es como soy. A algunas personas les gusta un programa un poco más, a mí no me gusta nada", dijo.

"Crecí viendo sólo el lado interpretativo de las cosas, y así es como lo veo yo también. Así que para mí, me gusta estar en Las Vegas, pero no tanto para las carreras", añadió.

Pero Verstappen dijo que sí entendía que los propietarios de la F1, Liberty Media, que también son promotores del Gran Premio de Las Vegas, tuvieran sus propios intereses comerciales.

"Lo entiendo perfectamente, y ya sabes, puedes verlo de dos maneras: por el lado de los negocios o por el lado de los deportes. Así que, por supuesto, también entiendo su punto de vista", dijo.

"Pero solo estoy expresando mi opinión sobre el lado del rendimiento de las cosas", dijo.