Verstappen conquista el GP de Australia, Alonso cierra en el podio y Sainz es sancionado
De locura: Triunfo de Verstappen, renacer de Hamilton y podio para Fernando Alonso. Esas son las tres noticias principales que ocuparán los titulares tras el cierre del GP de Australia. El neerlandes se ha quedado con una carrera que ha dominado en el tramo final. Un cierre frenético lleno de accidentes, toques y de una sanción que ha modificado el curso de la prueba.
Verstappen, que ya había ganado el GP de Arabia Saudí, confirma su condición de favorito en la Fórmula 1. El piloto de Red Bull es el hombre a vencer y, con 25 años, apunta hacia la consecución de un nuevo título mundial.
La carrera se decidió a falta de dos vueltas con una resalida que terminó con accidentes y con un toque de Carlos Sainz a Fernando Alonso. El piloto de Ferrari parecía dejar sin podio a su compatriota. Sin embargo, una sanción que le hizo perder posiciones e impulsó al asturiano hacia la tercera plaza de la clasificación.
¿Era necesaria la sanción a Sainz?
El toque dejó sin puntos a Sainz y causó indignación en el equipo y en el entorno del piloto: "No, no, no. Diles que esperen, tienen que esperar a que acabe la carrera y a hablar conmigo. Es muy severa. Díselo, Ricky (su ingeniero)", dijo el corredor de Ferrari al conocer la sanción.
Los comisarios de los equipos se preguntaban las razones de la sanción a Sainz. Incluso el mismo Alonso no se lo podía creer: "Vaya norma estúpida, cómo puede ser", advirtió el asturiano.
La sanción, desafortunadamente, le ha restado cinco segundos a Sainz que, en consecuencia, se ha quedado fuera de la cuarta plaza: "No puedo quedarme fuera de los puntos, es inaceptable, deben esperar hasta el final de carrera y hablarlo conmigo, por favor, por favor, claramente no me lo merezo. Es muy severa esa penalización, me quedo fuera de los puntos", resaltó el corredor de Ferrari.
El inconveniente protagonizado por Sainz y Alonso no fue el único que generó una bandera roja. Gasly y Ocon, corredores de Alpine, se tocaron en la salida de la curva 1. La pérdida de una rueda de Magnussen ocasionó otra determinación de los comisarios. Al final, el GP de Australia se ha visto marcado por los comentarios en las audiencias. Tres salidas, tres coches de seguridad y tres banderas rojas no pueden generar menos.
Verstappen obtuvo su segundo triunfo en tres carreras y Fernando Alonso rescató su tercer podio en la temporada. El piloto español pasa por un gran momento en Aston Martín y hace lamentar a la directiva de Alpine por dejarlo marchar.
Lewis Hamilton, por su parte, renace después de un inicio de año lleno de altibajos. El piloto británico, que había tenido un cruce de palabras con Alonso en la antesala del GP australiano, celebró por todo lo alto su segundo lugar y se le vio en buenos términos con el español.