Se trata de un alero nacido en Massachusetts, de 1,98 metros que ha estado en los filiales de los Warriors y de los Lakers en la G-League, pero sin poder haberse ganado un hueco en la NBA. Eso le hizo marcharse a Alemania, donde ha promediado 12.5 puntos, 3.3 rebotes y 1.2 asistencias.
"Es un jugador muy polivalente, que gracias a sus condiciones atléticas puede ayudar en el rebote y defender a varios perfiles de jugador. También puede hacer daño en transiciones y en el tiro a pies parados. Aprovecha su buen porcentaje exterior para amagar a las defensas y encontrar penetraciones hacia la canasta". Así lo han definido en su nuevo equipo, el Leyma Coruña.
Zoran Dragic
Quien sí conoce ya la liga ACB es el menor de los Dragic. Zoran ya jugó a un grandísimo nivel en el Unicaja, desde donde intentó el salto a la NBA. No le salió bien la aventura en Estados Unidos y regresó a Europa, enrolándose entre otros en las filas del Baskonia, con el que fue campeón en 2020.
En su última campaña ha jugado en el Cedevita con números más que notables de 15.9 puntos y 4.1 rebotes por partido en la liga doméstica y 10.2 puntos por encuentro en la ABA League. Además, ha vuelto a jugar con Eslovenia el Preolímpico en junio. Y ahora regresa a España para jugar con los 'Hombres de Negro'.
"Zoran Dragic es un jugador con una gran experiencia tanto a nivel internacional como en la Liga Endesa. Creemos que su calidad, unida a esa experiencia y su carácter ganador nos van a aportar un plus competitivo. Confiamos en que sea una de nuestras referencias ofensivas por su capacidad para anotar tanto desde la línea de tres puntos como penetrando o aprovechando sus virtudes en el juego sin balón y en contraataque", han definido desde la dirección deportiva del Bilbao Basket.