Jokic-Embiid, la batalla por el MVP de la NBA se libra en el teatro olímpico
Entre Nikola Jokic y Joel Embiid han ganado los cuatro últimos trofeos de mejor jugador de la NBA: tres para el primero (2021, 2022 y 2024) y el restante para el segundo (2023).
Pero a pesar de su notoriedad, ambos tienen mucho que probar en estos Juegos Olímpicos.
Jokic (29 años y 2,11 metros), el rey del basket jazz, capaz de inventar y dirigir desde su posición de pívot, tiene la misión de llevar lejos a su equipo, uno año después de renunciar al Mundial, en el cual Serbia fue subcampeona, decisión por la que recibió un buen puñado de críticas en el país.
El pívot de los Denver Nuggets nunca ha mostrado el nivel que tiene en la NBA con el equipo nacional, aunque formó parte del grupo que logró la plata en Río de Janeiro (2016).
Pero el Team USA sabe que Jokic es uno de los mayores peligros en la búsqueda de su quinta medalla de oro consecutiva.
"Es un jugador formidable, es realmente especial y es un desafío afrontarlo", señaló Derrick White.
Embiid, en fase de rodaje
Enfrente, un Embiid (30 años, 2,13 m) que quiere justificar su cambio de opinión: cortejado por Francia para los Juegos Olímpicos, finalmente decidió jugar con su país de adopción deportiva.
En la nación anfitriona de los Juegos se percibió como una traición la decisión del jugador, que ya había obtenido la nacionalidad francesa con el objetivo de convertirse en un Bleu.
"¡Joel, devuelve tu pasaporte francés!", le gritaron al gigante cuando apareció en la estación de tren de Lille esta semana.
Hasta el momento, en su debut con las Barras y Estrellas, evidencia falta de rodaje. Ha sido titular, junto con LeBron James y Stephen Curry, pero no ha mostrado todo su potencial.
El cuadro balcánico y Estados Unidos ya chocaron en la preparación con victoria clara para los NBA (105-79). El equipo europeo no contó con escolta Bogdan Bogdanovic y Steve Kerr, señaló que ese partido no sirvió "de gran cosa".
En el amistoso, Jokic firmó 16 puntos y 11 rebotes, mientras que Embiid hizo ocho en ambos apartados, repartiendo su tiempo con los otros interiores, Anthony Davis y Bam Adebayo.
El lunes, el jugador nacido en Yaoundé firmó su mejor partido ante Alemania (15 tantos, ocho capturas y cinco asistencias) y Kerr se lo reconoció: "Ha estado muy bien, muy activo, tiene manos muy grandes, un gran toque... Fue una pena que no le diéramos más el balón en la segunda parte".
El domingo se acabarán los preliminares: Lille acogerá una auténtica lucha de titanes NBA.