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Eddie Hall, el 'strongman' más famoso del mundo, revela que su dieta pudo matarle

Miguel Baeza
Eddie Hall
Eddie HallSWpix.com / Shutterstock Editorial / Profimedia
El inglés se retiró de la competición después de convertirse en el hombre más fuerte del mundo en el año 2017.

Eddie Hall (36), se hizo famoso por su capacidad a la hora de levantar cantidades de peso desproporcionadas prácticamente en todas sus formas. Ese objetivo le hizo seguir planes de entrenamiento y alimentación muy extremos que, reconoce ahora, pudieron costarle la vida.

Y es que la disciplina practicada por el de Newcastle-under-Lyme no es apta para cualquier humano. De hecho, a él se le pudo ver en varias ocasiones al borde del desmayo durante las competiciones en las que participó. Ayer mismo (19 de septiembre), contó en una entrevista con The Sun todo lo que debió hacer en pos de ser el mejor.

En dicha conversación llegó a contar que, en su momento álgido, ingería unas 12.000 calorías diarias: "No eran comidas. Era pastoreo constante. Era como una vaca... Tenía algo en la mano todo el día, ya fuera un sándwich o un batido de proteínas", confesó. "Beber constantemente, en cada momento de vigilia, ponía combustible en mi cuerpo, y eso equivalía a unas 12.000 calorías al día", agregó.

La Bestia, como se le apoda en el mundillo, relató la repercusión de esa vida extrema en su día a día: "Era bastante difícil. Pesar 195 kilos era casi insoportable. Quiero decir, incluso ponerme los calcetines fue una tarea titánica. Subir las escaleras fue una tarea gigantesca. Pero si me pedías que levantara 500 kg del suelo, era fácil", lamentó.

Finalmente, su salud se resintió y, según su médico, se encontraba cerca de la muerte: "Mis análisis sanguíneos estaban por las nubes, lo mismo que mis marcadores renales y hepáticos. Realmente estuve al borde del abismo y de sufrir todas las cosas asociadas con tener ese tamaño: ataque cardíaco, derrame cerebral, insuficiencia renal, insuficiencia hepática... Afortunadamente, nunca pasó nada, pero sí, un médico me dijo que dejara de hacerlo varias veces", explicó.