El Almería, un caballo desbocado en su estadio, donde también arrasa al Espanyol (3-1)
La buena sensación que le había dejado a Diego Martínez la actuación de los suyos ante el Betis, con victoria incluída, le hizo repetir once en el Power Horse Stadium. Y los primeros minutos confirmaron que había sido una buena elección. Con Darder en la sala de máquinas, el Espanyol mostraba sus credenciales ofensivas, con valentía, sin dejar que el rival dominase como lo viene haciendo en casa habitualmente.
Poco duró, sin embargo, ese buen hacer. Como esos caballos indomables que son los locales en casa, soltaron las riendas periquitas y se lanzaron a la ofensiva con un Adri Embarba motivadísimo. Suya fue la primera ocasión con un buen disparo lejano. Luego llegaría un saque de esquina, donde los de Rubi ya han anotado seis goles en LaLiga y a punto estuvo Akieme de firmar el séptimo. Su remate, tras la cesión de De la Hoz, lo sacó Álvaro Fernández con unos reflejos supersónicos.
Embarba, una pesadilla para sus excompañeros
Se palpaba el gol. Lo intentó de nuevo Embarba en una acción idéntica que acabó en la madera. Y poco después, el mismo extremo dejó en evidencia a Aleix Vidal y a Óscar Gil para centrar desde la línea de fondo y encontrar a Suárez en el segundo palo. El colombiano, killer en esas situaciones, controló con esfuerzo y golpeó sin pensarlo para abrir el marcador. A esa distancia y con esa potencia, imparable.
El 1-0 dejó tocado a un Espanyol que sólo gozó de una buena ocasión. Y qué oportunidad. Enfrascado Joselu en mil batallas con el árbitro, Iglesias Villanueva, tuvo que ser Aleix Vidal quien se plantase en el área en una rápida acción… pero se encontró con un Fernando en estado de gracia. Qué mano sacó el capitán indálico al filo del descanso para marcharse a vestuarios con la ventaja adquirida.
De un posible penalti en contra al 2-0
A pesar de esa jugada, tanto Aleix y Gil estaban sentenciados por sus malas prestaciones defensivas. Diego Martínez quiso tapar el agujero de la banda derecha con la entrada del joven Rubén Sánchez y de Edu Expósito. Fue este el que pudo provocar un penalti -que lo fue- que acabó con el árbitro enseñando fuera de juego. Si desde el VAR, con la tecnología tan avanzada de trazar las líneas, no lo tienen claro y es el colegiado de campo el que tiene que decidir según su ojo, ¿para qué queremos el vídeo?
Tras el susto del 'no penalti', el Almería cogió aliento para volver a encerrar en su área al Espanyol y para volver a perforar la meta de Álvaro Fernández. El tridente andaluz volvió a funcionar a las mil maravillas. Lo intentó Suárez desde la frontal, el rechace del meta llegó a Embarba, quien otra vez se encontró con un genial Álvaro, pero de nuevo el balón se quedó en poder del Almería, a un Baptistao que sí que iba a acertar para anotar el 2-0.
Y el tercero, otra vez Portillo
El encuentro se enfrió un poco con el tanto del brasileño, que no lo quiso celebrar por su anterior etapa espanyolista. Pero eso no hizo que los anfitriones se relajasen. Esperaron su momento y conseguirían un tercero con un contragolpe conducido por Melero, quien dominó el timing para la llegada de Portillo. El malagueño, que ya había anotado en la última jornada, volvió a mojar para sentenciar de modo definitivo el duelo.
Pudo llegar incluso el cuarto, lo perdonó El Bilal Touré, pero sí que hubo un gol más. Este fue, ya en tiempo añadido, el de Joselu, siempre en boca de gol. Con ese 3-1 ya sí se cerró el partido con una nueva victoria de un Almería que respira y de qué manera alejándose de la zona peligrosa. Suma 22 puntos y deja atrás a un Espanyol que se queda sólo con 20, a tres del descenso.
Jugador Flashscore del partido: Embarba (Almería).
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