El Bayern Múnich es uno de los equipos más potentes de Europa, no hay lugar a dudas, pero se ha convertido también en la gran bestia negra del Barcelona, que este miércoles afrontó un intrascendente encuentro ante los alemanes -ya sabían que estaban eliminados de la Champions tras el triunfo del Inter de Milán contra el Viktoria Plzen- y no fue capaz siquiera de darle una mínima alegría a su afición, especialmente benevolente pese al fracaso.
Cada vez que el conjunto catalán tiene que medirse al actual campeón de la Bundesliga, sobre todo en los últimos años, se ha producido un resultado similar. Y no de cualquier forma. La histórica goleada por 2-8 en 2020 fue una de las peores noches para los azulgranas, que no han mejorado demasiado en sus duelos ante el Bayern en posteriores citas: se han enfrentado en cuatro ocasiones y en todas ellas ha ganado el mismo equipo.
Desde aquel gol de Suárez que supuso el 2-4, todavía con mucho partido por delante (después llegaron cuatro más del rival e incluso aquel doblete de Coutinho -cedido entonces por el propio cuadro blaugrana-), el Barça ha sido incapaz de marcarle un gol (frente a los 15 encajados) a los alemanes. Un paupérrimo balance que se vio muy reflejado en el Camp Nou.
Se midieron en septiembre de 2021 en la fase de grupos de la Champions: 0-3 en el Camp Nou, igual que este miércoles, y otro 3-0 en el Allianz Arena. Ya el mes pasado, otra vez en el mismo contexto, los de Xavi Hernández mejoraron sus prestaciones, aunque igualmente cayeron derrotados (2-0) pese a contar con Robert Lewandowski. El último encuentro sirve para cerrar un círculo muy negro y dramático frente al cuadro de Múnich, imperial en sus duelos ante los de la Ciudad Condal.
Sin ningún tiro a portería
Otro de los hechos más sorprendentes, muy poco común en el caso del Barcelona, es que no llegaron a probar a Ulreich en los 90 minutos que duró el choque. El delantero polaco protagonizó alguna ocasión, pero sin ser capaz de golpear hacia la portería. La entrada de Ansu Fati también valió para activar a los culés en ataque, pero sus disparos se marcharon fuera o se toparon con piernas rivales.