El Ceuta, de ganar dos partidos en Primera RFEF a los octavos de la Copa del Rey
Es cierto que el Elche está comprando todas las papeletas para bajar a la categoría de plata del fútbol español, pero nadie le puede quitar al Ceuta el honor de haber eliminado en Copa del Rey a un equipo de Primera. La realidad es que ambos clubes, en sus respectivos contextos, afrontaban el partido en circunstancias similares, sobre todo porque lo tienen más o menos igual de complicado para conseguir el objetivo de la permanencia.
No corren buenos tiempos en la ciudad autónoma, pero las alegrías vividas frente a los ilicitanos y previamente contra el Ibiza, otro club que es colista en Segunda, no se van a olvidar en mucho tiempo. Ya saben, además, que se medirán a otro rival de LaLiga Santander, motivo de sobra para seguir disfrutando. Puede ser el Real Madrid o, por ejemplo, el Espanyol.
Mantenerse en la Copa del Rey es un arma de doble filo para los ceutíes porque no pueden focalizar su atención en el torneo liguero, pero indudablemente es un aspecto muy positivo en lo anímico. De hecho, noches como las de este martes pueden servir para trasladar esa euforia hacia la pelea por conseguir la salvación en Primera RFEF. Las sensaciones, sin embargo, no son nada positivas: dos victorias, un empate y 14 derrotas en los 17 encuentros disputados.
El equipo dirigido por José Juan Romero Gil está seis puntos por debajo del penúltimo clasificado, el Talavera, y nueve respecto al Rayo Majadahonda, club que se encuentra en la posición 18. Sorprende lo de la entidad madrileña porque hace no tanto (campaña 2020/21) disfrutaba de LaLiga Smartbank y ahora pelea por no bajar a Segunda RFEF. San Fernando y Pontevedra completan el cupo de descendidos provisionales y el Linense es quien se queda al borde del abismo con 18 unidades en su casillero, las mismas que el cuadro gallego.
Rodri, un héroe con solera
Rodrigo Ríos, más conocido como Rodri, fue el autor del único gol en el duelo contra el Elche. Es un jugador con una larga trayectoria en el deporte rey e incluso llegó a marcar en la élite con la camiseta del Sevilla, club con el cual también debutó en la Europa League. Sin hueco en un equipo de tanto nivel, se marchó al filial del Barcelona, que competía entonces en Segunda (siete goles en 27 participaciones), y después probó en el Sheffield Wednesday en Championship (una categoría menos respecto a la Premier League).
Su bagaje en Primera no iba a quedar resumido a esos encuentros con el conjunto hispalense porque jugó 12 con el Real Zaragoza y 27 con el Almería, donde ofreció un buen nivel (ocho tantos). A partir de ahí, experiencias de todo tipo: Munich 1860 (Bundesliga 2), Bristol City (Championship), Logroñés (Primera RFEF), Real Valladolid, Córdoba, Cultural Leonesa, Granada y Oviedo (en Segunda todos). Sin que sea ese el orden cronológico, la realidad es que no se puede negar que ha disfrutado de una variopinta trayectoria.