Al grito de "Olé, olé, olé, olé, ticos, ticos", los costarricenses se apoderaron rápidamente del terreno. Eran alentados por una afición que adquirió la mayoría de las 12.700 entradas vendidas, en un estadio con capacidad para 20.700.
El seleccionador, Gustavo Alfaro, había lanzado un esquema defensivo que cubría todo el terreno y una energía juvenil que les permitía pasar al ataque con velocidad.
A ello se sumaba una mitad de cancha paraguaya que comenzó frágil, y que apostó por alinear más artilleros que escudos.
A los primeros minutos del encuentro, la grada tica protegió un avance de Joseph Mora, quien lanzó un centro perfecto para Francisco Calvo. El hombre del Juarez conectó un certero cabezazo.
Poco después, Josimar Alcócer partió a toda carrera, sin que nadie atinase a cortarlo, permitiendo su disparo desde la boca del área, anotando el segundo para los ¡Pura Vida!
Sin rumbo
Al cuadro que actuaba como visitante le costaba tener presencia en el área rival, parte de su histórica esencia. Tras sacudirse el polvo quiso reaccionar, tratando de robar balones, aunque las líneas defensivas obstaculizaban la mayoría de los intentos.
El técnico, Daniel Garnero, había alineado a tres jugadores ofensivos más Adam Bareiro en punta, como único ariete de referencia, en sustitución de Alex Arce, quien no apareció ni en la lista de suplentes.
Los paraguayos intentaban ejecutar acciones individuales. Un tiro libre de Almirón fue controlado sin problemas por el portero Patrick Sequeira, de la Unión Deportiva Ibiza.
Julio Enciso trataba hacer de las suyas al igual que Damián Bobadilla, quien participaba del ataque. Pero no lograban solidez.
Paraguay resucita
Todo cambió en la segunda mitad, ya que se produjo la reacción. Ángel Romero entró como revulsivo.
En el 54', Mathías Villasanti superó a cuatro oponentes y colocó el balón para Ramón Sosa, quien mandó un misilazo imparable para Sequeira.
La garra paraguaya pareció renacer. Néstor Giménez tuvo una clara a la hora de juego que lanzó sobre el travesaño, aunque estaba impedido.
El atacante Julio Enciso reapareció y probó justo después a través de un latigazo que no encontró portería. Los ticos empezaban a sentir el peso del esfuerzo, quedándose sin energía y perdiendo el balón.
El profesor Alfaro refrescó las piernas de su equipo, colocando a Brandon Aguilera en reemplazo de Joel Campbell, superviviente de la escuadra dorada de 2014.
En los descuentos, Romero casi consigue la igualdad, pero el meta Patrick controló en angustia.
Costa Rica resistió para evitar el empate y lo logró, aunque igualmente dijeron adiós.