La Araña rescata al Atleti en una tarde de sustos para los colchoneros (0-2)
Vic 0-2 Atlético de Madrid
El Atleti ha afrontado su primer partido de Copa del Rey ante uno de los equipos más humildes que aún siguen vivos en la competición.
Los rojiblancos contaron con todas sus estrellas en la convocatoria. aunque muchas de ellas partieron desde el banquillo. Hombres como Correa, Sorloth, Gallagher o Riquelme partieron de inicio ante un equipo de muchas categorías menos.
Tarde de "halloween" para los madrileños
Los jugadores del equipo local salieron con mucha energía, conscientes de que estaban jugando uno de los partidos más importantes de sus vidas, intentaron castigar todos los errores de la defensa colchonera.
Sorloth continuó con la pólvora empapada. Su desempeño fue muy discreto y volvió a errar una ocasión similar a las que tuvo ante el Lille. Delante del guardameta estuvo lento e impreciso, su disparo salió en dirección contraria a la portería golpeando en la mano de un defensa del Vic. Cuadra Fernández no consideró la mano punible.
Kostis representó el talón de aquiles de la defensa visitante, un par de acciones de esas que le suben la tensión a los entrenadores motivó su cambio en el descanso.
La Araña al rescate
La sensación genera no fue baladí. El Cholo sustituyó a Sorloth, Javi Serrano y Kostis para dar entrada a Lemar, Galán y Koke.
Con el paso de los minutos el Vic fue creciendo en el partido generando ocasiones muy claras, a la vez, el Atleti perdió más fluidez.
No era suficiente, Julián y Griezmann a escena para sacar las castañas del fuego. Aún así, la cara del equipo no cambió, sin ideas en ataque y endebles en defensa.
Cuando más incertidumbre se palpaba en el ambiente, Giuliano Simeone provocó un penalti a falta de 10 minutos. El castigo fue doble para los catalanes, pues Alfons Senye vio la segunda amarilla. Julián fue el encargado de poner a los suyos por delante y dejar el partido visto para sentencia.
La araña, en un contragolpe después de un balón parado a falta de dos minutos, finiquitó el partido definitivamente con una buena definición.