Seguramente es la rivalidad más importante de todos los tiempos en el fútbol español. Este sábado 28 de octubre vivirá en Montjuic (16.15 horas, Movistar+) su edición número 255 y, hasta el momento, no ha podido gozar de una mayor igualdad.
El primero de todos esos Clásicos se jugó en el Hipódromo de los Altos de la Castellana, hoy en día Nuevos Ministerios (muy cerca del Santiago Bernabéu), ante 2000 espectadores. El duelo concluyó con victoria del FC Barcelona (1-3), con goles de Witty-Meyer, el alemán Udo Steinberg (algunas fuentes ponen al germano como autor de un doblete), quien también ejercería un relevante papel como redactor para el Mundo Deportivo, y el suizo Hans Gamper, fundador del equipo catalán en 1899.
A partir de ese momento, los dos equipos empezaron a verse las caras de forma recurrente hasta llegar a nuestros días. 121 años de enfrentamientos que tienen a los merengues con 102 victorias, los culés con 100 y han dejado un total de 52 empates.
En LaLiga, competición en la que se enmarca El Clásico de este fin de semana, el balance es de 77 triunfos del Real Madrid y 74 del Barcelona. Hasta en 35 ocasiones se firmaron las tablas. Por tanto, el de este sábado será el partido número 187 entre ambas escuadras en el campeonato doméstico.
Una denominación reciente
Lo cierto es que el nombre con el que se habla actualmente de este choque es relativamente reciente. No se le empezó a dar hasta la década de los 90, pero se instauró y arraigó definitivamente a principios de los 2000.
Costó tanto llegar a ello porque históricamente se consideraba El Clásico al Madrid - Athletic Club, que fue el encuentro más repetido entre clubes españoles hasta la temporada 2011/12. Vascos y madrileños se habían medido 215 veces hasta entonces, pero en diciembre de 2011 se produjo el sorpaso.
Volviendo al sábado, en las otras dos competiciones principales de la actualidad hay reparto de éxito. Vuelven a dominar los merengues en la Champions League con tres victorias por dos de los azulgranas y dos empates. En Copa del Rey, el Barça se impone de la mano de sus 16 partidos ganados a los 13 de su rival y el balance se completa con ocho tablas.