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Chimy Ávila aplica la ley del ex en El Sadar y el Betis vuelve a sonreír (1-2)

Daniel Núñez
Chimy Ávila rompe las ilusiones de Osasuna.
Chimy Ávila rompe las ilusiones de Osasuna.Jesus Diges / EPA / Profimedia
El conjunto dirigido por Manuel Pellegrini, que hizo debutar al canterano Mateo Flores y estará pendiente al estado físico de un Rui Silva que acabó tocado, se impuso por la mínima y robó la séptima posición a su rival, que se queda con los mismos puntos (15) tras la derrota.

Club Atlético Osasuna y Real Betis Balompié son dos equipos que acostumbran a dar espectáculo. Mientras que los navarros se crecen en El Sadar, los andaluces se caracterizan por ofrecer un fútbol vertical y atrevido con independencia del escenario. Todo parecía indicar que el encuentro, de la décima jornada de LaLiga EA Sports, iba a tener ritmo, ocasiones, vértigo y (quizás) más de un gol. Todo eso, desde luego, se cumplió con creces.

Recién empezado el partido, Vitor Roque batió a Sergio Herrera tras una espectacular jugada colectiva. Tigrinho había amenazado antes y se benefició de las formidables entregas de Pablo Fornals, que se convirtió en la brújula al dar una serie de pases decisivos -encontró a Aitor Ruibal a la espalda de la zaga, un movimiento clave en el tanto-. De forma casi inmediata, la talentosa pareja formada por Bryan Zaragoza y Aimar Oroz dio respuesta con un par de acercamientos.

Puro frenesí

Alejandro Catena, bajo la línea, evitó el doblete del brasileño allá por el minuto 23; y en el rechace, el mediapunta con pasado en el West Ham remató sin acierto. Otra acción brillante, de manual, elevó las pulsaciones de los defensores rojillos. No sabían por dónde les venían: desde la izquierda, desde la derecha... Hasta Héctor Bellerín, lateral, se convirtió en un potencial goleador al acariciar el segundo en una llegada que rechazó con maestría el portero mirandés.

Las estadísticas del partido.
Las estadísticas del partido.Opta by Stats Perform

Aunque la escuadra de Heliópolis había tenido ocasiones de sobra para ampliar distancias, lo cierto es que no hubo sometimiento como tal; más bien podía definirse como anarquía en ambas áreas. Este contexto era ideal para los jugadores más verticales, aunque ninguno de ellos cambió el resultado. Al borde del descanso, Ante Budimir, menos inspirado de lo normal, falló frente a Rui Silva en una extraña jugada.

Chimy Ávila salió en el inicio del segundo tiempo debido a unas molestias de Roque, algo lastrado a partir de la media hora, y se llevó algunos pitidos desde una grada que, en el pasado, coreaba su nombre. El cronómetro corría, se acercaba al 60' y los anfitriones se incorporaban al área a raíz de una falta lateral. Y el fútbol, que a veces es muy caprichoso, quiso que el 1-1, obra de Lucas Torró, tuviera lugar en una acción poco vistosa. En ningún caso hacía justicia a lo visto hasta entonces.

Triunfo con carga emocional

Luego, en el camino hacia la remontada, se le apagó la luz a Aimar cuando buscaba un aliado en zona de impacto. Los sevillanos estaban moderadamente agazapados por las embestidas de los hombres de Vicente Moreno, que recibieron un duro castigo en el 73'. La ley del ex la aplicó un tal Chimy, que fulminó las esperanzas de una afición que vio cómo su antiguo ídolo celebraba con efusividad y hasta rozaba el 1-3... de tacón.

Las valoraciones de los jugadores.
Las valoraciones de los jugadores.Flashscore

El recién ingresado Natan Bernardo recibió la roja directa en el 96' por una dura entrada sobre Raúl García, criado en la entidad del Benito Villamarín y también incorporado en el tramo final. Ni la inferioridad numérica ni el hecho de que el igualado y atractivo pulso terminara superado el 100', por cambios, tanganas y demás factores, impidieron la victoria del cuadro sureño. Y eso que Catena, ya con más corazón que razón, acarició el 2-2 en las postrimerías.

Jugador Flashscore del partido: Chimy Ávila.

Las estadísticas del choque, en Flashscore.