La irregularidad le ha pasado factura a un Atlético de Madrid que empezó la temporada con la ilusión de harcer algo diferente, de dejar huella. La prometedora victoria por 3-1 en el derbi de la primera vuelta de LaLiga generó un entuciasmo que se diluyó con el paso del tiempo. El golpe que supuso la eliminación de la Copa del Rey ante el Athletic fue la punta de un iceberg que culminó con otra campaña en blanco. 

La directiva, el cuerpo técnico y los jugadores del club se escudan en la clasificación para la próxima Champions como motivo de alegría. Sin embargo, en la afición existe un sentimiento: el Atleti pudo hacer más. Varios espacios en el terreno de juego bajaron su rendimiento y, tras la caída en Dortmund, la imagen que ha mostrado el equipo no ha sido positiva.

El ataque, precisamente, es uno de esos espacios que más dudas genera. Griezmann, que empezó de gran manera la campaña, perdió su ritmo. Morata marcó el pasado domingo un gol después de dos meses. Memphis ya no es un suplente de lujo y Correa, en medio de rumores que lo vinculaban con Arabia Saudí, se quedó en la plantilla bajo un rol secundario.

Alice Campello, esposa de Álvaro Morata, publicó en Instagram una foto que genera dudas respecto a la continuidad del ariete español "Last one", decía la imagen. 

La incertidumbre que relaciona a Morata ha impulsado al Atlético de Madrid a pensar en Dovbyk, uno de los goleadores de LaLiga EA Sports y en Sorloth, autor de un póker ante el Real Madrid, como los sustitutos del antiguo jugador del Chelsea. La plantilla colchonera podría tener modificaciones y los dos atacantes son del agrado de Diego Simeone.