Manuel Pellegrini ha recibido un jarro de agua fría. El entrenador chileno no podrá contar con Isco Alacarón (32). El centrocampista malagueño, que firmó un gran rendimiento durante el pasado curso -disputó 35 partidos, marcó nueve goles y ofreció siete asistencias-, tendrá que pasar de nuevo por el quirófano.
El cuerpo médico del Betis ha detectado una falta de consolidación en el callo de fractura y la formación de puentes óseos sólidos. Isco, de 32 años, fue operado en mayo luego de sufrir una grave lesión de peroné que le impidió disputar la Eurocopa con la selección de España.
"Tras las pruebas de control realizadas a Isco Alarcón estos días, se ha detectado una falta de consolidación en el callo de fractura y la formación de puentes óseos sólidos. Ante el riesgo de un déficit de consolidación completa en los próximos meses, tras valoración por parte de servicios médicos del club en conjunto con otros especialistas externos con experiencia en este tipo de procesos, se ha decidido revisar el foco de fractura quirúrgicamente para intentar revitalizar el mismo. El pronóstico queda reservado a las evolución postquirúrgica", añade el comunicado del club.