El Celta de Vigo pierde a Renato Tapia por una rotura fibrilar de grado I
Renato Tapia fue uno de los primeros cambios en el partido entre el Cádiz y el Celta de Vigo. El técnico visitante hizo una doble modificación justo antes de alcanzarse la hora de juego, momento en el cual dio entrada a Williot Swedberg y a Jailson Marques -el propio jugador peruano y Tadeo Allende abandonaron el verde-. Justo después, en la siguiente acción, el citado futbolista sueco convirtió el segundo tras una gran asistencia de Manu Sánchez. Sólo valió para sumar un punto (2-2).
No sorprendió que el ex del Feyenoord abandonara el campo porque había visto la tarjeta amarilla -recibió la primera del encuentro, todavía en el primer tiempo-. Se trata de un perfil que acostumbra a experimentar situaciones límite a nivel disciplinario y estar amonestado durante demasiado tiempo nunca es interesante. Sin embargo, conviene destacar que sólo ha recibido cinco cartulinas en la presente edición del torneo, menos de la mitad respecto a Iván Alejo, quien suma un total de 13.
Tapia cumplirá ciclo en el partido ante el Almería, una noticia que incluso puede interpretarse como positiva debido a los problemas físicos que padece. Es decir, iba a causar baja igualmente y va a quedar limpio para el resto de la competición, que se presenta muy exigente para un equipo que está siendo incapaz de ganar distancia sobre la zona roja. En el Nuevo Mirandilla, de hecho, dejaron escapar la victoria en el minuto 100.
El Celta ha informado este miércoles 28 de febrero de la lesión que sufre: una rotura fibrilar de grado I en el recto anterior del muslo derecho. Además, el club ha informado sobre los plazos estimados de recuperación (algo casi inédito en pleno 2024): estará en el dique seco por tres semanas. Así, queda descartado también para la visita al Santiago Bernabéu y será duda en la vigesimonovena jornada, cuando el Sevilla acudirá a Balaídos.