El Granada, ante un fin de semana que puede acabar con su descenso
Los de Sandoval aún se agarran a un clavo ardiendo para soñar con su permanencia en la élite. Difícil, casi utópico, pero no imposible. Claro que tendrían que ganar los cinco partidos que quedan y esperar muchos fallos en esas jornadas del Cádiz, Celta y Mallorca para salvarse.
Pero a pesar de encontrarse en su mejor estado de forma, con dos victorias en casa y un empate a domicilio en los tres últimos compromisos, los números podrían ya condenarle esta misma jornada.
Si el Granada pierde en su visita al Sánchez Pizjuán y tanto Celta como Mallorca ganan sus respectivos encuentros, los andaluces serían ya equipo de Segunda división. No habría más cábalas que hacer.
Pero si es capaz de empatar o ganar al Sevilla, entonces aún tendría un hilo de esperanza. Aunque tan fino como que en la siguiente jornada debería vencer al Real Madrid, que puede llegar ya, o no, como campeón de Liga.
Una final la que tiene por delante el cuadro de la ciudad de la Alhambra en el derbi regional de este domingo.