El futuro de Joao Félix parece exhibir claridad. El mediapunta, que estuvo en préstamo durante el cierre de la pasada campaña en el Chelsea, regresó al Metropolitano después de que los blues decidieran no comprarlo. 

En el Atlético no le esperó un escenario distinto: Diego Simeone no cuenta con él. Menos tras el evidente cruce de poderes que vivió el club madrileño en la reciente campaña. Cuando Joao Félix deslumbró con Portugal en Catar 2022, la hinchada pidió la cabeza del entrenador argentino. Al final, la directiva apostó por 'El cholo'. Félix huyó y buscó un refugio en Londres y, con las labores terminadas, el tiempo le dio la razón a Simeone. 

Ahora, la realidad del jugador es complicada: ni la hinchada, ni el cuerpo técnico, ni la directiva lo ven como un hombre indispensable. Félix, en ese contexto, busca un cambio de aires y el PSG, que presentó a Luis Enrique como nuevo entrenador en el transcurso de la semana, es una posibilidad real. 

De París, a Félix le gustan tres elementos puntuales: uno, que disputa Champions y aspira a títulos importantes. Dos, el vestuario, integrado por compañeros suyos en la selección portuguesa (como Vitinha, Renato Sánchez, Nuno Mendes o Danilo Pereira) y tres el papel de Luis Enrique, quien hace unos meses sonaba para fichar por el Atlético de Madrid. 

El club rojiblanco, por su parte, espera una propuesta formal. El PSG ya ha oficializado algunos refuerzos en el amanecer del mercado. El ataque, sin embargo, vive en medio de incertidumbre pues ni Mbappé ni Neymar han confirmado su continuidad. 

Félix emergue como una solución, tanto como para el PSG como para el Atlético. Una venta le permitiría al equipo español hacer caja. Los galos, en cambio, obtendrían a un mediapunta que, aunque está lejos de su mejor versión, expone una calidad envidiable. 

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