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Mendilibar: "Me voy orgulloso de ser una pequeña parte de la historia de este gran club"

Daniel Núñez
Mendilibar, en uno de sus últimos partidos.
Mendilibar, en uno de sus últimos partidos.JOHN THYS / AFP
El vasco quiso despedirse tanto de la entidad como de la afición en un texto que ha sido publicado por el propio conjunto hispalense.

José Luis Mendilibar (62) ya es historia del Sevilla. Llegó en una situación extremadamente complicada, con la Europa League en un segundo plano porque el descenso acechaba, y consiguió sacar la mejor versión de una plantilla que volvió a creer en sus posibilidades. El trámite de LaLiga EA Sports se superó con solvencia, muy pronto, para evitar la alarma y así poder centrar todos los esfuerzos en la competición fetiche del club -siete títulos con el último-.

El ex del Eibar o el Real Valladolid no ha conseguido darle continuidad a esos buenos resultados durante la presente campaña. Son solo dos victorias en diez partidos (frente a la Unión Deportiva Las Palmas y el Almería), una racha negativa que le ha acabado costando el puesto. Y eso que nadie podía imaginarlo cuando se enfrentaron al Manchester City, por las buenas sensaciones, en la final de la Supercopa de Europa, un duelo que se decidió a través de la tanda de penaltis.

La carta al completo

"Queridos sevillistas:

mi etapa con vosotros ha sido corta, pero estaremos de acuerdo en que extraordinariamente intensa. No querría despedirme sin dar las gracias, en primer lugar, a los dirigentes que tomaron la decisión en marzo de darme la oportunidad de dirigir a este gran club que es el Sevilla.

A todos los trabajadores y empleados del club que han hecho muy fácil el día a día en la ciudad deportiva.

Al 'staff', por su trabajo y por estar siempre atentos a lo que en cada momento pudiera necesitar.

A los jugadores, que con su trabajo y esfuerzo han sido los principales protagonistas de los importantes logros que hemos podido conseguir en estos meses.

Y por encima de todo, a esa afición sevillista, que desde el primer momento hasta hoy me ha mostrado todo su apoyo y todo su cariño y que sin su pasión y su aliento, hubiera sido imposible conseguir lo conseguido.

Dejo amigos en el club y dejo amigos en una Sevilla a la que siempre consideraré como mi casa. Me voy también orgulloso, tras la noche de Budapest, de pasar a ser una pequeña parte de la historia de este gran club.

No me queda más que desearle el mejor de los futuros a un Sevilla FC que siempre llevaré en mi corazón.

¡Aúpa, Sevilla!".