Modric pasa de estrella indiscutible en el Madrid a inquilino habitual del banquillo
El de Montilivi era un partido muy importante para el Madrid. Visitaba al líder de LaLiga en un campo en el que perdió 4-2 la última vez y con la derrota en el Metropolitano aún resonando en el madridismo. Luka Modric, que venía de no jugar un solo minuto en el anterior duelo liguero, ante la UD Las Palmas, tampoco apareció por el campo en Girona. Ancelotti decidió no darle ni un minuto. Hay que remontarse tres partidos atrás para constatar la presencia del croata en el terreno de juego y no fue un buen augurio. Modric salió como titular en el derby del Metropolitano pero en el descanso, con 2-1 en contra para el Real, Ancelotti optó por dejarlo en el banquillo y no jugó nada en toda la segunda mitad. El técnico italiano dijo que “no señalo a nadie con los cambios. No ha jugado un buen partido, pero igual que el resto de compañeros”.
Esta es una situación inédita para el croata en el Real Madrid desde hace más de diez años, cuando Mourinho, el gran artífice de su fichaje, decidió prescindir de él en dos partidos (Ajax y Barcelona) en octubre de 2012. En un centro del campo muy físico y muy poblado, el balcánico no está teniendo las oportunidades que esperaba.
A 11 encuentros de llegar a la cifra de 500 con el Madrid, Modric es el 15º jugador en minutos de la plantilla, sólo por delante de Ceballos, Militao, Brahim, Mendy, Lunin y Lucas Vázquez, algunos de ellos por cuestión de lesiones. Cuando renovó, rechazando otras propuestas, lo hizo pensando que sería importante para el equipo y no que era un premio por los servicios prestados. Él es consciente de estar en su último año como jugador blanco pero no le gustaría que el final fuera así. Aún queda temporada y partidos para revertir la situación, empezando por el Nápoles en Champions, pero Modric está inquieto ante una situación nueva para él.