Esta comunicación también tendrá que realizarla ante la UEFA, que tendrá que hacer a su vez sus correspondientes informes para dar su aprobación en el caso de que el conjunto azulgrana dispute finalmente competiciones europeas.
Hay que recordar que la organización de fútbol continental está investigando el caso Negreira y podría tomar cartas en el asunto como en su día hizo con la Juventus y el Moggigate y sancionar al Barcelona sin jugar la Champions.
Mientras eso ocurre, la directiva de la entidad catalana está ultimando la negociación para conseguir un crédito de un máximo de 1.500 millones de euros para llevar a cabo las remodelaciones que tiene pendientes en el Camp Nou y en sus alrededores, y que una vez terminadas serán la base de sus ingresos.
El Barça, tras un acuerdo firmado en junio de 2022 con el Ayuntamiento de la Ciudad Condal, podrá usar el estadio Lluis Companys entre agosto de 2023 y mayo de 2024, que tendrá un aforo de cerca de 55.000 personas sentadas.
La cesión será para los días de partido del primer equipo masculino y las preparaciones previas y posteriores a las jornadas. El FC Barcelona también podrá utilizar el estadio, de forma puntual, para entrenamientos y otros eventos deportivos, incluyendo, también, las necesidades que pueda tener el equipo femenino.