Modric y Ceballos, los siguientes en pasar por la sala de renovaciones
El Real Madrid domina los tiempos. De ahí que vaya con tacto cuando se trata de dar oficialidad a un fichaje o a una renovación. Esperó, por ejemplo, una semana para publicar la incorporación de Bellingham, a pesar de que el Dortmund ya lo había hecho incluso con el precio convenido para el traspaso.
Esta semana estaba en el calendario que era el ideal para hacer público al acuerdo al que hace más de un mes se llegó por Toni Kroos. Y al día siguiente, para no restarle protagonismo al alemán, ha llegado la de Nacho, también sellada antes de su participación en la Liga de las Naciones.
En breve llegará la de Luka Modric por un año más. El croata, decepcionado por perder la final de ese torneo de selecciones, se ha tomado unos días de respiro. A pesar de los cantos de sirena y la lluvia de millones con la que le han querido bañar desde Arabia Saudí, había dado su palabra de continuar. Sólo falta el anuncio oficial.
Ceballos, hasta 2027
Más costosa ha sido la continuidad de Dani Ceballos. El sevillano quería garantías de que iba a tener un rol más importante sobre el césped. Ha sido la suya una negociación con subes y bajas constantes, una montaña rusa de sensaciones en las que, finalmente, ha sido convencido por Ancelotti.
A pesar de la llegada de Bellingham, que llega para ser titular, de la renovación de Kroos y Modric, del potencial de Valverde, de la explosión de Camavinga y de la mayor madurez en su segundo año de blanco de Tchouaméni, el utrerano dispondrá, o eso le ha prometido el técnico italiano, de minutos de calidad.
La apuesta es importante, pues a la mejora salarial se le añade el firmar por cuatro años más. Sólo queda estampar la firma en el documento. Si nada extraño ocurre, incluso esta misma semana podría anunciarlo el Real Madrid.