Desde hace meses vienen manteniéndose conversaciones a diferentes niveles para que Ancelotti sea el próximo seleccionador brasileño. Ednaldo Rodrigues, presidente de la Federación Brasileña de Fútbol (CBF) tiene muy claro el objetivo y no quiere desviarse mientras existan opciones de llevarlo a cabo. De hecho, en vez de apostar por una alternativa definitiva a Ancelotti, se está trabajando en un plan de transición (Ramon Menezes es el seleccionador provisional) para los seis partidos clasificatorios de cara al Mundial 2026. 

Rodrigues ha hablado personalmente con Ancelotti, con algunos de los miembros de su equipo y con el Real Madrid. Quiere ir de frente y no meter los pies en el barro. La respuesta de Ancelotti ha sido siempre de agradecimiento y de interés pero poniendo por encima de todo su compromiso actual con el Real Madrid y no aceptando, en ningún caso, una propuesta de futuro para dentro de un año. 

Desde la CBF transmiten tranquilidad, respetan los tiempos del técnico y del Real Madrid y prefieren esperar antes que contratar a otro seleccionador. Tienen la esperanza de que Ancelotti acepte el reto tras esta temporada en el banquillo blanco pero existe ningún tipo de acuerdo futuro.

A Ancelotti le agrada el desafío pero no quiere desviar su atención de lo que tiene por delante con el Real Madrid la próxima temporada. Por su parte, la CBF percibe un mensaje positivo por parte del entrenador de Reggiolo y esperará el tiempo necesario para saber si puede contar con él a partir del verano. Esa es la auténtica realidad del caso Ancelotti a día de hoy.