El equipo de Benzema gana un partido gracias al busto de un general muerto
El choque entre el Sepahan y el Al Ittihad, club en el que milita el francés Karim Benzema, estaba programado para el 2 de octubre pero fue suspendido cuando los visitantes se negaron a un jugar en un estadio adornado con un busto del general Qassem Soleimani, que murió en una acción militar de las fuerzas estadounidenses en enero de 2020.
La Comisión de Disciplina de la AFC estimó que el conjunto local había "creado en el interior del estadio un entorno con riesgo e inestable en materia de seguridad, que condujo a la suspensión del partido".
El Sepahan "no actuó de manera neutra políticamente", añadió la AFC, que decidió darle los puntos a su rival.
En su decisión, la AFC señala al club la necesidad de retirar el busto del estadio, advirtiéndole de que "toda nueva violación podría llevar a una sanción más severa".
El general Soleimani dirigía la fuerza Al Qods, encargada de las operaciones exteriores de los Guardianes de la Revolución. Con esa función era el arquitecto de las operaciones militares iraníes en Oriente Medio.
Murió en el ataque de un dron estadounidense en enero de 2020 en Bagdad y en Irán, de mayoría chiíta, es una figura homenajeada. Por contra, Arabia Saudita, sunita, lo consideraba un individuo peligroso.