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Óscar Aranda, el extremo que emociona en el Famalicão de la liga portuguesa

Miguel Baeza
Óscar Aranda protege el balón durante un partido.
Óscar Aranda protege el balón durante un partido.MIGUEL RIOPA / AFP
El excanterano del Real Madrid es uno de los imprescindibles para Armando Evangelista en el séptimo clasificado del campeonato nacional luso.

El Famalicão de la Liga Portugal vive un momento dulce. Con 16 puntos después de 10 jornadas disputadas, el conjunto de Vila Nova ocupa una meritoria séptima plaza y sueña con acercarse a puestos europeos, que le quedan a una distancia de tan sólo cuatro unidades.

Una de las sensaciones de este club situado entre el norte de Oporto y el sur de Braga es el español Óscar Aranda (22), un extremo muy incisivo y con gran golpeo de balón que abandonó La Fábrica del Real Madrid en el verano de 2023 para enrolarse en las filas de su actual equipo.

En poco más de un año, su calidad le ha permitido convertirse en un habitual de las alineaciones de Armando evangelista. Sin ir más lejos, en lo que llevamos de 2024/25 ha participado en todos los compromisos ligueros, acumulando un total de 807 minutos.

Estadísticas de Óscar Aranda.
Estadísticas de Óscar Aranda.Flashscore

Hasta el momento, el granadino ha participado en 2 de los 12 goles del Famalicão, siendo, con 17, el hombre de la plantilla azul y blanca que más tiros ha intentado. Además, es el mejor de sus compañeros de ataque en pases completados con éxito (169) y en porcentaje de acierto (74,8%), por delante de otros cracks del Viejo Continente como Vinicius o Raphinha.

Di María, Gyokeres y Aranda

La habilidad de Aranda con el balón en los pies provoca que sus rivales tengan muchas dificultades a la hora frenarle. Por ello, en muchas ocasiones, terminan recurriendo a las faltas. Tanto es así, que el andaluz es el futbolista sobre el que más infracciones se cometen del campeonato (26), superando a tipos de la talla de Ángel Di María, Trincao o el insaciable goleador sueco Viktor Gyokeres.

Parece que el exmerengue, al que las lesiones persiguieron durante un largo tiempo, ha encontrado su sitio en el Famalicão. El ecosistema, en el que nadie supera los 30 años y se apuesta por el talento joven, es ideal para favorecer su desarrollo.