Ese choque de la ida de los cuartos de final de la Liga de Campeones ante los catalanes es una prioridad para el PSG, que tiene la competición europea como su gran obsesión.

Por ello Luis Enrique, que en fechas anteriores ya hizo rotaciones en las que incluyó a su estrella Kylian Mbappé, con suplencias o cambios durante el partido, podría aprovechar el sábado para dar minutos a algunos jugadores menos habituales, pensando en la dosificación de fuerzas de su plantel.

Con 12 puntos de ventaja sobre el segundo, el Brest, los parisinos están en una situación muy cómoda en la Ligue 1, donde solo una improbable hecatombe en las próximas semanas parece que podría impedirle revalidar su título nacional.

El PSG llega además reforzado en la confianza por sus resultados tras el reciente parón por los partidos de selecciones nacionales, en los que ganó el Clásico en Marsella pese a jugar con diez hombres durante más de una mitad, además de clasificarse el miércoles para la final de la Copa de Francia al derrotar al Rennes en semifinales.

Por su parte, el Brest (2º) jugará el domingo, como local contra el modesto Metz (17º, en puestos de descenso). A solo un punto del segundo lugar está el Mónaco (3º), que recibe ese mismo domingo al Rennes (8º).

La 28ª jornada francesa se abre el viernes con un duelo entre el Lille, cuarto clasificado -último dentro de la zona Champions-, y el Marsella (7º), que está a 7 puntos de ese 'Top 4' y que necesita la victoria para apurar sus opciones de llegar a ella.