A diferencia de 2022, no habrá giro de 180 grados, ni prolongación repentina. " Terminaré mi aventura en unas semanas, jugando mi último partido en el Parque de los Príncipes el domingo", dijo Kylian Mbappé en un mensaje de vídeo publicado en las redes sociales el viernes por la noche.
Deja el París Saint-Germain, "el mejor club de Francia, uno de los mejores del mundo" según sus palabras, tras siete temporadas de leal servicio. El atacante, que llegó proveniente del Mónaco en 2017 cuando en ese entonces tenía 18 años, se proclamó campeón del mundo en Rusia con la selección francesa antes de consolidarse como la estrella número 1 del fútbol galo. Con el club de la capital, ha ganado 6 ligas francesas, 3 Copas de Francia (y una 4ª si gana la final contra el Lyon), 2 Copas de la Liga y 3 Trofeos de la Champions.
La Champions y el Balón de Oro, sueños incumplidos
Convertido en el máximo goleador histórico del club, Mbappé participó en la final de la Liga de Campeones de 2020 contra el Bayern , en una Final atípica en la que se vio eclipsado por Neymar. El nuevo capitán de la selección francesa se perderá la Liga de Campeones. Ni siquiera con el brasileño y Lionel Messi logró volver a jugar una final. La eliminación del martes por la noche contra el Borussia Dortmund, tras una semifinal en la que tuvo muy poca influencia en ambas partes, habrá sido por tanto su último partido continental con el PSG.
Su última temporada dio un vuelco desde el principio, al quedarse fuera de la gira asiática de pretemporada pese a haber declarado ya que no quería prolongar su contrato, y anunciar después su marcha prematura antes de los 1/8 de final de la Liga de Campeones de la UEFA contra la Real Sociedad. Desde entonces, Luis Enrique le ha utilizado poco, llegando a sustituirle en el descanso contra el Mónaco y contra elOM en su último Clásico a la sombra.
Nasser Al-Khelaïfi olvidado
Mbappé es famoso por su comunicación, a menudo sibarita y a veces mal enfocada, y eligió precisamente a las personas a las que quería dar las gracias. Mientras que nombró a todos sus entrenadores, a los directores deportivos Leonardo y Luis Campos y a las personas que trabajan entre bastidores, no hizo ninguna mención a Antero Henrique, el antiguo director deportivo que sigue siendo influyente en el club, ni al presidente Nasser Al-Khelaïfi.
Estas "omisiones" son muy reveladoras, sobre todo en lo que concierne al NAK, ya que los últimos meses han parecido muy pesados, con actuaciones regularmente preocupantes, faltas de empuje y muy limitadas a pesar de unas estadísticas siempre elevadas. La historia llega así a un extraño final, quizás un año demasiado pronto, lo que habría evitado un epílogo interminable. Para disgusto de los dirigentes del PSG, no habrá traspaso, aunque el importante ahorro en la masa salarial sea bienvenido, sobre todo teniendo en cuenta la drástica caída de los derechos de televisión.
Un mensaje demasiado frío
El propio Mbappé explicó en su mensaje, que duró poco menos de 4 minutos, que necesitaba un "nuevo reto " después de haber pasado toda su carrera en la Ligue 1. A sus 25 años, necesita encontrar una nueva fuente de motivación para alcanzar los objetivos que se ha fijado. Así, no podrá ayudar al PSG a triunfar en Europa, y la situación es aún más amarga este año, en el que Neymar y Messi se han marchado, dejándole a él en el punto de mira.
Este vídeo, muy suave, quizá demasiado encorsetado y, al final, poco conmovedor, tranquilizará a los que lamentaban la falta de afecto y empatía que Mbappé mostraba a sus seguidores a pesar de su estatus. Muy académico, su mensaje no toca la fibra emocional de los seguidores del PSG, antiguos o nuevos. Aunque nadie ha igualado sus estadísticas ofensivas (255 goles y 108 asistencias en 306 partidos hasta la fecha) y dejará una huella imborrable, no habrá alcanzado los índices de popularidad de algunos gloriosos veteranos como Raí o Pauleta.
Todo apunta a que fichará por el Real Madrid, donde formará parte de toda una plantilla ofensiva que podría ganar la Liga de Campeones el 1 de junio. Todo cambiará para él. Queda por ver si será capaz de adaptarse a esta nueva realidad.