Riqui Puig lidera a LA Galaxy, dominador en la MLS, y rompe una doble barrera
Riqui Puig, la eterna promesa del Barcelona, se resignó a abandonar el club de sus amores ante la falta de oportunidades. Dado que apenas superaba la veintena y ya había acumulado bastantes partidos con el primer equipo de la entidad azulgrana, contaba con no pocas opciones para seguir su carrera en Europa. Sin embargo, optó por aterrizar en una competición que luego recibió a jugadores como Leo Messi o Luis Suárez.
Su experiencia en Los Ángeles Galaxy, club con el cual amplió su contrato hasta 2027, no fue siempre agradable. Pero la franquicia está recuperando el brillo de antaño, hasta el punto de liderar la Conferencia Oeste de la MLS con un balance de 55 puntos, sólo peor que el de su homólogo en el Este (el Inter Miami, que suma 62). Tras disputar 29 encuentros, su equipo acumula 16 victorias, siete empates y seis derrotas.
Parte de culpa del crecimiento de la entidad tiene como responsable directo al mediocentro catalán, que brilló con luz propia en el derbi del domingo frente a Los Ángeles FC (4-2). Su buen hacer de cara a portería, con un tanto y un doblete de asistencias, fue fundamental para conseguir un excelso 9,5 de nota según las valoraciones de Flashscore. Los visitantes ganaban por 0-2 al descanso, pero se marcharon sin premio alguno.
Un rendimiento excelso
Riqui ha participado en 21 dianas en lo que va de curso (10G y 11A), unos registros inéditos para él (7G y 7A en el anterior). Eso sí, aún tiene margen de mejora en el apartado de las tarjetas amarillas porque ha sumado ya ocho, las mismas que en toda la temporada anterior, cantidad algo elevada para un jugador de carácter ofensivo. Además, ha sido amonestado en los tres últimos encuentros de su equipo, incluida la eliminatoria de la Leagues Cup.
Todo apunta a que su futuro a corto y medio plazo seguirá vinculado al país norteamericano, especialmente dada esa renovación. Puig está contento en Los Ángeles y ahora ve más cerca que nunca la posibilidad de conquistar un título. No celebra un logro de tal calibre desde mediados de 2021, cuando el Barça de Koeman impuso su ley en la final de la Copa del Rey (0-4 al Athletic Club de Bilbao, con doblete por parte de Messi).