Mohamed Salah marcó su gol número 200 con el Liverpool y neutralizó el tanto de penalti de Jean-Philippe Mateta, antes de que Harvey Elliott anotara el gol de la victoria en el tiempo añadido para sellar los tres puntos.

El Liverpool, que encabeza la clasificación con 37 puntos en 16 partidos, se ha acostumbrado en las últimas semanas a marcar goles en los últimos minutos, con tantos de Trent Alexander-Arnold que le valieron un empate contra el campeón, el Manchester City, y una victoria por 4-3 contra el Fulham.

"Planeamos antes de los partidos para eso: para empezar bien, para estar bien y para terminar bien", dijo Alisson el sábado.

"Pero esto es fútbol, es un juego impredecible y a veces todo lo que estás haciendo no funciona por muchas razones y no tienes tiempo durante el partido para descubrir qué está fallando".

"Hay que cambiar rápidamente de mentalidad y a veces también se trata de pasión. La tuvimos al final del partido, en los últimos 20 minutos, mucha pasión por parte de nuestros jugadores, mucha intensidad y nunca nos rendimos. Tuvimos la recompensa de marcar dos goles".

Las aspiraciones del Liverpool al título se enfrentan a una dura prueba en diciembre, con sus dos próximos partidos de liga, que le enfrentarán al Manchester United y al Arsenal.

"Sabemos que tenemos grandes retos ahora en diciembre, grandes rivales", dijo Alisson.

"Pero en la Premier League todos los partidos son importantes, tienen el mismo valor. Lo que importa es la pasión que pongas en los partidos. Y el próximo reto que tenemos por delante es el más importante, así que vamos a por él".