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Tras perder por la mínima ante un equipo entrenado por Steven Gerrard en el que destacan jugadores como Wijnaldum, Fofana, Toko Ekambi, Demarai Gray o Moussa Dembelé (autor del gol), el técnico portugués criticó las supuestas promesas de la Liga saudí.
"Hicimos un gran partido con un equipo improvisado, con jugadores fuera de posición, porque nosotros, como la mayoría de los equipos de esta liga, empezamos sin jugadores. He trabajado duro en los últimos dos meses para construir un equipo competitivo y volví a Arabia (Saudí), al Al-Shabab, con la idea y la ilusión de ver una liga competitiva, fuerte, en la que todos los equipos tuvieran la oportunidad de competir en cada partido, pero la realidad no es así", comenzó diciendo en rueda de prensa.
Vítor Pereira, que en abril concedió una entrevista a Flashscore en la que admitió que quería "ver qué soluciones tendría en Europa", llegó al cuadro saudí a mediados de la temporada pasada, con el club en la segunda mitad de la tabla, y consiguió acabar la liga en octavo lugar. Su contrato expiraba en junio, pero renovó por una temporada más.
"Aparte de los equipos de delante, los clubes fuertes (Al Nassr, Al Hilal, Al Ittihad y Al Ahli, nota del redactor), la mayoría de los demás no tienen posibilidades de competir. Miro a los banquillos de suplentes y veo a dos o tres jugadores, o a cinco jóvenes de 19 años en mi equipo, que no están listos para competir. Por desgracia, esa es la realidad. Estoy muy decepcionado porque trabajo duro, me dedico mucho, quería venir aquí para añadir calidad y competir, pero de esta manera no es posible. No tengo nada más que decir", declaró, abandonando la sala de prensa.
Los grandes fichajes del Al Shabab esta temporada baja fueron el italiano Giacomo Bonaventura, ex del Fiorentina, y el internacional marroquí Hamdallah, que jugaba en el Al Ittihad, pero perdió a Vitinho, Iago Santos y Rakitic.