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Contracrónica: La selección más fiable cae a las puertas de las medallas

David Olivares
Bernat Sanahuja celebra un gol ante Croacia
Bernat Sanahuja celebra un gol ante CroaciaAFP
La eliminación en cuartos de final de waterpolo masculino es especialmente dura. España había finalizado la fase de grupos en primera posición, ganando todos sus partidos. Victorias ante Australia, Hungría, Serbia, Japón y Francia con superioridad hispana.

Es cierto que el cruce de cuartos era endiablado. Pese a ser cuarta de su grupo, no hay que olvidar que Croacia es la vigente campeona olímpica y que sólo había cedido ante grandes rivales como Italia y Estados Unidos por idéntico resultado (11-14).

España llevaba nueve torneos consecutivos en los últimos siete años sin fallar en las semifinales. La del waterpolo masculino era una medalla con la que se contaba a priori, a tenor de los últimos resultados en campeonatos de Europa y del mundo.

Y es que España era, hasta esta tarde, un fijo en semifinales. Empezando por los últimos Juegos Olímpicos, los de Tokio 2020 celebrados en 2021 por la pandemia. En la capital nipona llegamos a semifinales donde perdimos por la mínima (10-9) ante Serbia. Después, Hungría nos apartó del bronce.

Cuatro Europeos y cuatro Mundiales en el podio

En campeonatos de Europa llevamos cuatro torneos sin bajarnos del podio. Plata en Barcelona 2018, plata en Budapest 2020, bronce en Split 2022 y oro en Zagreb-Dubrovnik 2024.

En los últimos cuatro Mundiales también hemos tocado metal. Plata en Gwanju 2019, oro en Budapest 2022, bronce en Fukuoka 2023 y bronce en Doha 2024.